Tomb Raider de 2013 es uno de los mejores juegos de la serie. Después de un par de fracasos comerciales, Crystal Dynamics nos entregó una aventura que, pese a estar fuertemente inspirada en Uncharted, logró conquistar a millones de jugadores y dio pie a una nueva generación para esta icónica franquicia. Un año después, en el 2014, una versión mejorada llegó al PlayStation 4 y Xbox One, la cual no solo envolvió todo el contenido en una bonita Definitive Edition, sino que también nos entregó una serie de mejoras visuales y técnicas. Más de una década después, Aspyr se ha encargado de llevar esta experiencia al Nintendo Switch y Switch 2,algo que, parece, resultó ser un problema más grande de lo esperado para este equipo.
De manera inesperada, Tomb Raider: Definitive Edition llegó al Nintendo Switch y Switch 2 la semana pasada. El título no solo trae de regreso este clásico, sino que le da a un nuevo público la oportunidad de experimentar una de las aventuras más desgarradoras de Lara Croft. Sin embargo, el rendimiento no ha sido el esperado. Si bien hay puntos positivos, está claro que Aspyr no tuvo el presupuesto necesario para entregar la experiencia deseada, especialmente en la nueva consola de la Gran N.
¿Un juego de PS3 o PS4?
Al tratarse de un juego que llegó al PS4 y Xbox One en el 2014, muchos esperaban que la versión de Nintendo Switch 2 fuera capaz de entregar una experiencia que estuviera a la par del resto, y hasta cierto punto esto es cierto. Tomb Raider: Definitive Edition en las consolas de la Gran N nos ofrece todo el contenido que encontramos en las otras plataformas. Es decir, los trajes adicionales, cómics, material extra, multiplayer, y hasta los logros que todos recordamos están presentes en este paquete. Esto sin mencionar la gran aventura que sigue intacta en pleno 2025, lo cual siempre es positivo ver.
Sin embargo, las cosas se complican cuando hablamos del apartado visual y técnico. Comenzando con los aspectos positivos, el rendimiento de Tomb Raider: Definitive Edition en Switch 2 es perfecto. Aquí encontramos una resolución de 2160p y 60fps en dock, mientras que en portátil tenemos 1080p escalado y 60fps. En el caso del Switch, la resolución es de 1080p escalado y 30fps en dock, y en portátil encontramos una menor resolución con el mismo frame rate. Esto no es algo malo, todo lo contrario. El juego tiene un gran desempeño, y lo que nos ofrece la nueva consola de la Gran N llega a superar lo que encontramos en PS4 y Xbox One en más de un sentido.
Notablemente, los 60fps son totalmente estables. En todo el tiempo que llevó jugando, no me he encontrado con un solo momento en donde este número disminuya, algo que sucede constantemente en el PS4. A la par, en Switch 2 tenemos un par de elementos únicos, como pantalla táctica y HD Rumble. También hay funciones de giroscopio, las cuales son extremadamente sencillas y limitadas solo al menú inicial, así como controles de mouse con los Joy-Con 2, los cuales tienen una extrema sensibilidad, incluso en la opción más baja, por lo que no recomiendo esto, pero es una opción interesante.
El problema viene cuando hablamos sobre el apartado visual. En este sentido, parece que Aspyr tomó como base las versiones de PS3 y Xbox 360. Aspectos como las sombras, iluminación y vegetación fueron reducidas sustancialmente, al grado de que hay una clara diferencia con lo que encontramos en PS4 y Xbox One. Junto a esto, el modelo de Lara Croft tampoco está a la par de lo que vimos en el 2014. Notablemente, en el Switch 2 no hay rastro del TressFX Hair, tecnología con la cual el cabello de la protagonista actúa de una forma más natural, en lugar del modelo que se mueve como pañuelo errático que aquí tenemos.
Uno de los detalles que será positivo o negativo, dependiendo de la persona, es el modelo fácil de Lara Croft. En la Definitive Edition de PS4 y Xbox One encontramos una cara más retocada, con facciones naturales que funcionan de gran forma con la iluminación y el cabello aquí presente. En el Switch y Switch 2 vemos algo más apegado a la versión original de PS3 y Xbox 360, la cual sigue siendo la misma, pero con una menor definición. No es el final del mundo, pero es un detalle muy notorio que sorprenderá a más de una persona.
A lo largo de los años, Aspyr ha demostrado ser un equipo que sabe trabajar con el presupuesto que tienen, y en más de una ocasión esto no es suficiente para entregar la experiencia deseada. Este es el caso con Tomb Raider: Definitive Edition. Si bien muchos esperábamos estas rebajas en la versión de Nintendo Switch, el Switch 2 es una consola muy capaz que puede ofrecer experiencias similares a las que encontramos en el PS4. Está claro que el estudio tomó como base lo que lograron en el Switch, y simplemente aumentaron la resolución y el frame rate en el Switch 2, lo cual es bastante decepcionante.
Junto a esto, es imposible comprar una mejora que te dé acceso al mejor rendimiento que encontramos en la versión de Switch 2. Esto significa que si ya compraste el juego en Switch, y quieres disfrutar de este juego en la nueva consola que compraste en el Buen Fin o tienes pensado estrenar en Navidad, tendrás que volver a comprar este título. Esto es algo que no tiene excusas, y es una mala práctica.
A 12 años de su lanzamiento
Más allá del apartado visual y técnico, Tomb Raider: Definitive Edition en Switch y Switch 2 sigue siendo la misma experiencia que llegó a nuestras manos en el 2013. Esta es una gran aventura que fluye de maravilla. Con este reboot, Crystal Dynamics hizo más que solo imitar lo que Naughty Dog consiguió con Uncharted, y fueron capaces de entregar un título más realista para la serie, la cual tuvo una gran recepción en su momento, y hoy en día se mantiene como una entrega muy divertida que vale mucho la pena.
En lugar de continuar con las aventuras a gran escala, Crystal Dynamics reimagina a Lara Croft como una arqueóloga que se ve en la necesidad de cometer horribles actos para superar la terrible situación en la que se encuentra. Después de naufragar, la protagonista y sus acompañantes se ven acechados por una antigua tribu, y tendrán que hacer todo lo posible para sobrevivir. En una época en donde la discusión sobre la disonancia ludonarrativa estaba en la boca de todos, es interesante ver cómo el estudio trató de enfrentarse a la inescapable necesidad de matar enemigos. Pasa algo de tiempo antes de que la protagonista tome una vida, y cuando lo hace, el contexto justifica sus acciones y esto es algo que la define durante el resto de esta aventura.
Esto va de la mano con el mayor énfasis en la acción. Si bien aún hay oportunidades para recorrer tumbas, resolver acertijos y encontrar coleccionables, el juego claramente se enfoca en los momentos en donde Lara Croft tiene que atravesar campamentos de enemigos. Aunque la pistola es una opción rápida, Tomb Raider también nos ofrece la oportunidad de evadir enfrentamientos y eliminar contrincantes de forma silenciosa. Todo esto se complementa con un sistema de progresión bastante tradicional que nos ofrece un constante sentimiento de crecimiento, lo cual también se refleja en la narrativa.
Una buena opción, pero…
Tomb Raider: Definitive Edition es un bonito paquete de 10 horas que nos ofrece acción de primer nivel y una historia muy entretenida. Si bien sus 12 años le pesan en más de un sentido, este sigue siendo un fantástico juego que todos pueden disfrutar en estos momentos. La versión de Nintendo Switch 2 es algo que pudo ser mejor. Si bien la mayor resolución y el mejor frame rate es algo que funcionan muy bien, especialmente en modo portátil, es innegable que Aspyr pudo entregarnos algo que estuviera a la par de las otras versiones. El apartado gráfico, aunque no es malo, claramente es el talón de Aquiles de esta experiencia.
La cuestión es: ¿cuál versión de Tomb Raider: Definitive Edition tener? La respuesta va a depender por completo de cada jugador. Si tienes cualquier otra plataforma, jugar en Switch 2 tal vez no suene tan atractivo. Sin embargo, si solo tienes las consolas de Nintendo, entonces esta sigue siendo una buena opción. Solo espero que el inevitable lanzamiento de Rise of the Tomb Raider y Shadow of the Tomb Raider nos ofrezca algo más apegado a lo que encontramos en las otras plataformas.
