
La evolución de Pikachu es muy cara
Es un hecho que se ha puesto de moda el coleccionar las tarjetas coleccionables de Pokémon, piezas que han estado en circulación desde el auge de marca, y que claramente, año con año se vuelven más caras debido a que algunas generaciones dejan de producirse. Con esto en mente, de forma reciente una de estas cartas ha alcanzado niveles absurdos de rareza, lo cual implica un precio alto para quien desee hacerse con ella.
Una de las legendarias cartas de Raichu de prelanzamiento, consideradas entre las más raras del juego de cartas coleccionables, ha salido a subasta y ya ha alcanzado cifras astronómicas, con una puja actual que supera los $135,000 dólares. Lo cual para este momento de la franquicia no es demasiado extraño, ya que otras piezas de la primera generación como la de Charizard alzan los números hasta el cielo.
Estas cartas, que llevan impreso el texto “PRELANZAMIENTO” en una esquina, jamás debieron existir oficialmente. Fueron producto de un error de impresión y se ordenó destruirlas, aunque algunas copias lograron escapar de la trituradora. Con el paso del tiempo, se convirtieron en la joya de la corona para los coleccionistas de Pokémon TCG, al punto de que solo se cree que existen unas once copias en todo el mundo.
Hasta ahora, solo dos cartas han sido certificadas oficialmente, lo que incrementa aún más el valor y la mística que rodea a estas piezas. El hecho de que una de ellas esté disponible en subasta ha encendido la fiebre entre los coleccionistas de alto perfil, quienes ven en este ejemplar no solo un trofeo, sino también una inversión de enorme valor.
Mientras el mercado de las cartas de Pokémon continúa en auge, casos como este demuestran que los errores de impresión más improbables pueden transformarse en objetos de culto. Para los fanáticos, el Raichu de prelanzamiento no es solo una carta: es un pedazo de la historia y, quizá, la pieza definitiva de cualquier colección.
Vía: GN

Nota del autor: Creo que nunca en mi vida he comprado un sobre TCG de Pokémon. Definitivamente me quedo comprando solo los juegos.